Al hablar de habilidades sociales, nos referimos al conjunto de conductas aprendidas de forma natural que se manifiestan en situaciones interpersonales. Este tipo de comportamientos se pueden enseñar y desarrollar para que el individuo tenga una mejor adaptación en su entorno.
Las personas somos animales sociales, y debemos aprender a convivir unos con otros. Sin embargo, las relaciones entre individuos no siempre son fáciles, y muchos sujetos pueden poner barreras a este tipo de comunicación, que pueden derivar en problemas psicológicos.
Ciertas condiciones relacionadas con los trastornos del espectro autista como el Síndrome de Asperger, por ejemplo, presentan un déficit de habilidades sociales. Presentemos o no problemas similares, lo importante es que sepamos que este tipo de competencias se pueden entrenar.
La mayoría de personas domina el nivel primario de habilidades sociales, que van desde saber mantener una conversación hasta escuchar y tener un mínimo de empatía. Si subimos un par de escalones, encontramos competencias más específicas que pueden requerir la intervención de un especialista para que se desarrollen adecuadamente. Hablamos, por ejemplo, de la necesidad de expresar afecto, la negociación como respuesta al conflicto o la asertividad, muy demandada en procesos de selección de recursos humanos.
En el Instituto Andaluz de Sexología y Psicología te ofrecemos tratamientos específicos para actuar sobre la timidez y vencer el miedo a las relaciones sociales, desarrollando así las habilidades del paciente. ¡Póngase en contacto con nosotros!