Hoy en día asistimos a una gran revolución en cuanto a herramientas diagnósticas y terapéuticas. Una de ellas es el llamado ‘Neurofeedback’, un tratamiento que busca modificar la función cerebral actuando de modo directo sobre ésta, es decir, ayuda y enseña al cerebro a regularse por sí mismo y mantenerse en un estado normal hasta que los síntomas del dolor, ya sea físico o mental, desaparezcan por completo. No es un fármaco que acabe con nuestros problemas o dolores sino una manera de regular los patrones cerebrales para que el cerebro funcione de manera más saludable.
Una de las diferencias entre la piscoterapia en sí y el neurofeedback es que la primera aborda los procesos psicológicos en sí mismos y la segunda se plantea desde la relación entre el cerebro y la máquina. Ésta última trabaja en búsqueda de la modificación directa de la función del sistema nervioso a través de aparatos que están diseñados específicamente para cada caso.
En cuanto a sus aplicaciones clínicas destaca en el tratamiento para el TDAH (Trastorno por déficit de atención con hiperactividad) o trastornos como la epilepsia, daño cerebral, ansiedad, TOC, cefalea, etc. Muchas veces las personas entran en un círculo vicioso intentando paliar un dolor y ésto ocasiona daños emocionales que, a su vez, provocan sensaciones dolorosas en el cuerpo.
Se trata de un método no invasivo que influye en la función cerebral de modo pasivo, es decir, no emiten ningún tipo de onda o energía y, por tanto, no es doloroso. También permite, en muchos de los casos, potenciar el rendimiento de los procesos cognitivos para mejorar la atención, la memoria y el aprendizaje. Cada persona necesita un protocolo diferente según las necesidades personales y particulares que tenga.
Si sientes dolor y no eres capaz de hacerle frente, cuenta con nosotros para poder proporcionarte la ayuda necesaria para mejorar tanto física como mentalmente con las técnicas más efectivas adaptadas a ti.