El auge de las nuevas tecnologías y la posibilidad de acceder a toda la información pone en peligro nuestra salud psicológica.
Lo buscan todo en internet. El simple descubrimiento de un grano puede ser interpretado como el principio de una terrible enfermedad. Sobre todo, se da en personas en cuyos ambientes familiares se habla demasiado de enfermedades o sobre los estados de salud. Sobre el porqué se dispara esta interpretación horrible de algunos signos corporales es aún un misterio, aunque lo más importante es que tiene solución.
Los expertos sí que han trazado un perfil del hipocondríaco. Una persona que tiene un miedo desmedido a la muerte, a enfermar o al sufrimiento. Cualquier señal que a cualquier persona le hubiera pasado inadvertida, hace que se disparen todas las alarmas y crean que es algo grave, lo que genera trastornos de ansiedad y estrés. Lo que hace que empeore.
La paradoja es que muchos de ellos, tienen pánico a acudir a los profesionales médicos por el miedo de que les digan que realmente están enfermos. O que en muchas ocasiones, desconfíen de los sanitarios dando más importancia a esos indicios que los propios médicos. Otros, por el contrario, hacen exactamente lo opuesto. Cuando van al médico y éste les comunica que no tienen ninguna enfermedad, se quedan momentáneamente tranquilos, por lo que acuden más veces muy seguidas para seguir experimentando esa sensación de tranquilidad.