Tal y como adelantamos la semana pasada, con este título Lara Salguero Lucas, exalumna del director del Instituto Andaluz de Sexología y Psicología (IASP) y director del Máster en Sexología Clinica y Terapia de Pareja y del Training en Terapia Sexual y de Pareja del IASP, Francisco Cabello Santamaria, defendió su tesis doctoral.
Una tesis en la que se ve claramente que el deseo erótico es uno de los componentes de la respuesta sexual humana que mayor interés suscita desde la comunidad científica
El componente motivacional y emocional del deseo erótico determina la idea de que el deseo es mucho más que un impulso fisiológico para mantener una actividad sexual. Por ello, uno de los objetivos fundamentales de los estudios desarrollados en el presente trabajo es conocer más a fondo el componente motivacional del deseo y, entendiendo este como un proceso afectivo, analizar la capacidad de autorregulación del mismo.
Se han llevado a cabo por tanto, dos estudios principales; el primero de ellos pretende estudiar la regulación del deseo erótico a través de una prueba experimental analizando la influencia de la experiencia de deseo y la impulsividad, como variable de personalidad, en una prueba conductual y un segundo estudio que tiene como objetivos estudiar la posibilidad de aplicación de la regulación del deseo a través de la construcción de una escala estudiando así la relación existente entre la regulación y el deseo erótico.
En el deseo erótico y en su regulación influyen multitud de variables que definen al sujeto como un ser activo en el proceso. El entendimiento de las variables contextuales y situacionales donde se experimente el deseo erótico será fundamental para entender 11 su funcionamiento y poner en marcha su regulación.
Variables más estables en el sujeto como ciertas variables de personalidad no parecen determinar ni predecir de forma clara la activación y el desarrollo del deseo, viéndose este más influido por la experiencia de deseo en un momento determinado.
Destacando la importancia del contexto y la situación se concluye, con los datos obtenidos en los estudios, que el deseo erótico en pareja debe ser analizado y estudiado de manera diferenciada del deseo erótico hacia otras personas con las que no haya relación sentimental y diferenciado de un deseo erótico solitario.
El deseo en pareja parece tener características propias que hacen que no podamos hablar de una única naturaleza del deseo. Con todo ello, se cierra este trabajo desarrollando una discusión que plantea las dificultades inherentes al estudio del deseo y sus posibilidades en la práctica clínica asumiendo las características emocionales y motivacionales del constructo y haciendo referencia al modelo de deseo propuesto en el marco teórico, abriendo así la puerta a una línea de investigación que tenga como objetivo probar dicho modelo y verificar su validez en la explicación del funcionamiento y desarrollo del deseo erótico.