Muchas parejas utilizan lubricantes a la hora de mantener relaciones sexuales. Los motivos para hacerlo pueden ser variados. En ocasiones puede ser por necesidad, como en el caso de la sequedad vaginal que puede originar la menopausia o cuando la penetración produce dolor o malestar. Pero en otras ocasiones su uso puedes ser simplemente por diversión.
Hoy nos gustaría enseñaros a hacer vuestros propios lubricantes. Sabemos que en el mercado podéis comprar lubricantes de diferentes tipos pero algunos, debido a su composición química, pueden producir alergia en la zona genital.
Algunos lubricantes hechos con productos naturales son:
- Diferentes tipos de aceites como el aceite de jojoba, el de semilla de uva, el de espino amarillo, y el de canola. Si utilizamos estos aceites como lubricantes tenemos que tener precaución, ya que no son compatibles con los preservativos de látex, por lo que debemos buscar otro método anticonceptivo o preservativos sin látex -por ejemplo, a base de silicona-, aunque son más difíciles de conseguir.
- Si vas a utilizar preservativos de látex una opción es utilizar glicerina o mantequilla de mango, aunque ésta es difícil de conseguir.
- Los yogures naturales sin azúcar y probióticos, a menudo usados para tratar infecciones por hongos, que tienen la ventaja de proteger la flora vaginal del cambio brusco entre el pH de la vagina y el semen.
- El aceite de coco es uno de los lubricantes naturales más utilizados ya que es fácil de aplicar, huele y sabe bien y es bastante duradero. Además es fácil de conseguir y barato.
- La clara de huevo muy útil porque su consistencia similar al moco cervical. El único inconveniente que presenta es que después de las relaciones hay que tener una correcta higiene.
Ahora sólo te queda decidir que opción es la que mas te conviene, comprar los lubricantes o hacerlos tu mismo.