Tal y como vimos la semana pasada, el punto G es una zona situada a unos 3 a 5 centímetros de la entrada de la vagina, más concretamente en el frontal de la pared vaginal, que fue descubierta en 1944 por el doctor Grafenberg.
Pero, ¿cuál es su relación con el clítoris y cómo podemos estimular correctamente esta zona? Pues hoy en el Instituto Andaluz de Sexología y Psicología te contamos todo lo que debes saber al respecto.
Relación entre el punto G y el clítoris
En la última entrada de nuestro blog hablamos sobre que el punto G se localiza en la zona en la que termina la parte interna del clítoris. Un hecho que explica la relación directa entre estos dos términos.
Por ello, diversos estudios han demostrado que no existen dos orgasmos distintos sino uno pero con sensaciones distintas. Así, se alcanzará el clímax de una forma u otra dependiendo de si estimulas el clítoris de una forma más o menos directa.
Cómo encontrar el punto G de una forma práctica
La mejor postura para encontrar el punto G es estar tumbado boca arriba. Luego debes introducir los dedos índice y corazón en la vagina y curvarlos. Habrás encontrado el punto G cuando:
- Encuentres una zona de la pared vaginal con una textura rugosa.
- Cuando empieces a estimular esa zona sentirás una sensación como de ganas de orinar.
- Debido a la estimulación del punto, la zona G comenzará a hincharse y a endurecerse ligeramente.