No es nada extraño ir por la calle, en el metro o en cualquier lugar de la ciudad y ver las personas mirando hacia abajo con el móvil. Cada uno en su mundo. Una vez más, en una barrera invisible entre las personas, en una burbuja que les permite distanciarse del resto.
Lo más llamativo es que las últimas encuestas indican que las nuevas generaciones no pueden (o creen no poder) vivir sin el móvil, y esto ya es un problema que sobrepasa los límites.
- Te pierdes tus propios pensamientos. El uso de la tecnología nos deja cada vez menos espacio para estar a solas con nosotros mismos.
- Te pierdes la experiencia de perderte. Sin GPS, sin rutas preconcebidas, sin aplicaciones que indiquen los puntos turísticos… No hay nada mejor que descubrir una ciudad perdiéndose en sus calles.
- Te pierdes el conectar emocionalmente con desconocidos. No olvides que las grandes amistades y amores han surgido entre dos perfectos deconocidos, que se encontraron por azar y conectaron emocionalmente.
- Te pierdes el sonido del silencio. El uso de la tecnología nos impide disfrutar de esos momentos de quietud.
- Te pierdes lo que suceden en el ambiente. Ver un concierto a través de la pantalla del móvil o limitarse a fotografiar un lugar implica perderse la mejor parte, la energía que recorre el ambiente.
- Te pierdes la posibilidad de relajarte y desconectarte del mundo. Antes dejábamos mensajes en el contestador automático, ahora si no contestamos en cuestión de segundos, incluso se enfadan.
- Te pierdes los detalles que hacen único cada momento. Estar pendientes del móvil te impide captar la sonrisa fugaz de la persona que está a tu lado, esa pequeña flor que creció al lado del camino o disfrutar del sabor de la comida.
- Te pierdes la oportunidad de experimentar cosas nuevas. Pasamos un 26% del tiempo hablando por un Smartphone, la mayor parte del tiempo la empleamos enviando mensajes, navegando por las redes sociales y consultando aplicaciones. No pierdas el tiempo, que no te lo roben.
- Pierdes salud y vida. Estas personas tienen un estilo de vida más sedentario y mostraban una menor capacidad cardiorespiratoria, según investigadores Kentucky y Ohio.
- Te pierdes tu mundo interior. La introspección es lo que nos permite conocernos, en esos momentos en que estamos a solas con nuestras emociones, sueños y mi