Los celos, como comentamos anteriormente en este mismo blog, son un sentimiento natural en el ser humano que, si sabemos cómo gestionarlos, no tienen por qué ser importantes en nuestra vida, ni complicarnos la misma.
Para evitar que los celos se nos vayan de las manos, aquí tienes algunos consejos:
- Lo primero que debemos hacer es informarnos bien sobre qué son los celos, para partir de una base certera, y a partir de ahí luchar para controlarlos. Para saber algo más sobre los celos, puedes volver a leer el post que escribimos sobre los mismos aquí.
- A continuación, debemos fomentar, potenciar y cuidar el amor propio. Los celos compulsivos son motivados por no valorarse a uno mismo y creer siempre que los demás son mejores y que por eso tu pareja puede engañarte.
- Por otro lado, debes tener claro que en caso de que tu pareja te engañe no es tu culpa. El culpable en estos casos es la otra persona, que demuestra no ser de fiar, pero nunca tú. Si no quiere estar contigo, tiene que ser valiente y decírtelo, nunca engañarte.
- La confianza es fundamental. En una relación sana lo normal es que confiemos en la otra persona. Sin embargo, si no confías y estás pensando todo el tiempo que puede engañarte, debes preguntarte ¿si no confío en él/ella merece la pena esta relación?
- Por último, debemos tener presentar que en muchos casos los celos son inventados. Para evitar sufrir en vano, lo mejor que podemos hacer es confiar en la otra persona ciegamente o dejar la relación, pero no seguir forzando y tratar de investigar y atosigar a la otra persona con preguntas.
Siguiendo estos simples consejos y con mucho amor propio, podremos mejorar nuestra relación considerablemente. Para conocer más, pregúntanos sin compromiso.